¿ADSL o Fibra Óptica? La velocidad del ADSL y la Fibra Óptica son los principales protagonistas en los dilemas a los que se enfrentan los usuarios a la hora de contratar Internet. La evolución histórica de la velocidad ADSL y el desarrollo que ha tenido la Fibra Óptica son de especial interés para valorar cuál de estas alternativas es la más beneficiosa.
La velocidad ADSL
La velocidad ADSL ha supuesto durante años una de las principales formas de trasmisión de datos. Lo que ha llegado a implicar una velocidad superior a la que habíamos estado acostumbrados hasta el momento.
Sus ventajas se hicieron notar rápidamente, por la posibilidad de mantener una conversación telefónica a la par que se navegaba por Internet. Un importante hito en la evolución de las comunicaciones y que beneficiaba no sólo a los hogares en su índole familiar o de ocio, sino que también a las empresas, generando un incremento de la eficiencia de las comunicaciones.
La irrupción de la velocidad de la fibra óptica
Cuando el usuario estaba totalmente adaptado a las comodidades y velocidades del ADSL, como un huracán apareció la fibra óptica ofreciendo una mayor velocidad así como una importante mejoría en la calidad de la conexión.
El mecanismo de transmisión de datos de la Fibra Óptica mejora con respecto al clásico de la velocidad de ADSL, permitiendo una mejoría en la transmisión de datos así como una importante reducción en los errores de velocidad que pudiesen surgir o una mayor seguridad.
La velocidad es la gran ventaja de la Fibra Óptica, entre otros factores porque al contrario de lo que sucede con el cable convencional, el FTTH permite que no se pierdan megas de velocidad por el camino.
La banda ancha de Fibra Óptica de 100 megas reales ha representado el principio del cambio. El principio del reinado de la Fibra Óptica y el comienzo de la decadencia del ADSL.