Prácticamente todos los hogares cuentan ya con conexión a Internet, pero si además, cuentas con conexión a través de fibra óptica, habrás comprobado que su velocidad es muy alta, o que pueden estar conectadas varias personas a la vez sin que esta se resienta lo más mínimo.
Los hilos de Fibra Óptica, son cables de puro vidrio de un grosor muy fino, capaces de transportar datos y luz a grandes distancias y, lo más importante, a gran velocidad.
Además, la conexión FTTH (fibra óptica hasta el hogar), no es otra cosa que una mejora en la propia fibra óptica. Este sistema de transmisión de datos basado en la transmisión de luz a través de una fibra de silicio hace llegar la señal hasta el mismo hogar del usuario.
Gracias a esto, la señal llega directamente al domicilio, asegurando máxima velocidad así como un mayor número de usuarios y una mejor calidad de servicio. Una mejor conexión a Internet, y por supuesto, más veloz.
Las conexiones de fibra óptica hasta el hogar no sufren interferencias en la velocidad provocadas por la distancia desde la central hasta el hogar y los cambios de tensión generados por el cambio en el cableado o la temperatura.
Omitiendo estas interferencias, se garantizan velocidades máximas de navegación así como la reducción de los tiempos de espera tanto en la subida como en la bajada de archivos.
La fibra óptica hasta al hogar, ha supuesto una enorme evolución, convirtiéndose en la tecnología de las comunicaciones del futuro.